Confirmación de condena por sustracción de bebés: “son 40 años de lucha y banderas inclaudicables” | |
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La Cámara de Casación Penal rechazó los planteos presentados por la defensa y confirmó la condena para Marino González por delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura militar. La sentencia de 13 años, lo responsabilizó por la sustracción y la supresión de la identidad de los mellizos, hijo e hija (Sabrina Gullino) de los desaparecidos Raquel Negro y Tulio Valenzuela, hechos ocurridos en Paraná.
La decisión judicial fue considerada uno de los fallos más importantes de los últimos años en Entre Ríos, dado el impacto que los casos de apropiación de menores tuvieron en el país. "El hoy condenado represor, había sido absuelto por esos hechos en 2011, pero la Corte Suprema de Justicia de la Nación ordenó un nuevo juicio en donde se lo encontró culpable", se recordó desde el Registro Único de la Verdad.
Repercusiones en derechos humanos
En diálogo con Elonce, la referente de la multisectorial en defensa de los derechos humanos, María Luz Piérola, sostuvo: "la decisión nos parece fantástico en este contexto de negacionismo que estamos viviendo. Appiani y otros fueron responsables de la pérdida de identidad de los mellizos Valenzuela Negro y de la patota torturadora y genocida que actuó en Paraná en la última dictadura cívico-militar", expresó a Elonce.
La entrevistada remarcó que el fallo reafirma la importancia de seguir construyendo memoria y justicia. "Es un hecho fundamental que se siga trabajando la memoria y construyendo identidades en este pueblo tan bastardeado desde el negacionismo de este gobierno", aseguró y consideró que “tenemos que reivindicar la lucha de los organismos de los derechos humanos”.
Justicia sin venganza
Respecto a los recursos judiciales presentados por las defensas, Piérola valoró que se garantice el debido proceso, aun tratándose de responsables de crímenes de lesa humanidad. "Nunca quisimos venganza, siempre apelamos a la construcción de justicia. Por eso reconocemos que, aunque sean genocidas, torturadores y asesinos, tienen derecho a apelar en el marco legal que corresponde", señaló a Elonce.
En ese sentido, enfatizó que la lucha se sostiene bajo las banderas de memoria, verdad y justicia, para que se conozca el destino de los 30.000 desaparecidos y se continúe con la restitución de identidad de los jóvenes apropiados. “Con estas resoluciones se hace justicia, que es lo que reivindicamos junto a la memoria y la verdad”, afirmó.
Memoria inclaudicable
Menciona que esa lucha judicial y memoria deben servir para esclarecer el destino de los 30.000 desaparecidos y recuperar la historia de muchos jóvenes apropiados durante la dictadura. “Seguimos peleando para que se pueda saber, qué pasó con los 30,000 desaparecidos, cuál fue su destino final, porque falta recuperar justamente la historia de muchos de ellos y de los jóvenes que fueron apropiados”, resaltó.
Piérola, quien también fue testigo querellante en la causa, destacó que el camino recorrido simboliza décadas de militancia. "Son 40 años de lucha y no nos van a bajar las banderas. Seguimos construyendo la historia de un país mejor, un país para todos y no para pocos como estamos viviendo ahora", afirmó a Elonce.
Con la confirmación de la pena a González, la Justicia entrerriana consolidó un fallo emblemático que refuerza la búsqueda de verdad histórica y la reivindicación de quienes aún reclaman saber el destino de sus familiares. | |