El portón de la Alcaidía de Madariaga se abrió y Juan Grabois salió rodeado de cámaras, abrazos y banderas. Horas antes había sido detenido por participar en la toma del Instituto Juan Domingo Perón, una acción que rechazó la disolución del organismo y denunció la "criminalización de la protesta". Pero lo que parecía un cierre conflictivo terminó en anuncio: “El 2027 empieza ahora”, dijo. Y confirmó su precandidatura presidencial.
En el breve acto improvisado frente al edificio policial, Grabois aprovechó para lanzar duras críticas al Gobierno nacional, en especial al Ministerio de Seguridad. Aseguró que su detención le permitió ver de cerca en qué condiciones trabaja el personal policial. “Le agradezco a la ministra Bullrich por dejarme conocer el pésimo estado en el que trabaja la Policía Federal. Es de lo peor que vi en toda mi vida”, expresó.
Según su relato, las oficinas estaban en mal estado, sin calefacción, con ratas y computadoras “del año 1984”. “No tienen sistema ni recursos. Es realmente indigno. Una de las cosas que voy a cambiar cuando sea presidente es esto. No se puede sostener un sistema de seguridad con trabajadores abandonados”, agregó.
No habló de los internos, pero sí remarcó que lo que vio fue suficiente. Dijo que, aunque conoció situaciones duras en cárceles y villas, esta experiencia fue “reveladora”. Y aseguró que no se dejó intimidar: “No nos sacaron la bandera y no nos van a parar”.
Desde Patria Grande ya empiezan a delinear su estrategia electoral. Planean recorrer el país para construir una propuesta alternativa “al modelo represivo y de exclusión” del gobierno de Javier Milei. Prometen una candidatura con “identidad nacional, justicia social y derechos humanos”.
Con tono combativo, Grabois concluyó: “Nos quieren quebrar, pero cada intento de represión nos fortalece. Una vez más, desde abajo y con los de abajo”. |